Skip to main content

Números de Erario: gasto en salud en enero de 2021

A lo largo de 2020 documentamos recortes consecutivos en el gasto en salud y en inversión física del IMSS, el ISSSTE, la Secretaría de Salud y de las transferencias del FASSA, incluso en los momentos más álgidos de la pandemia. Inició el año y con él las expectativas de que esta vez los recursos asignados a la salud se gasten en tiempo y forma, en línea con el presupuesto aprobado.

Sin embargo, el primer mes de 2021 sugiere que es poco probable que tales expectativas se cumplan, ya que el gasto de las instituciones de salud, en conjunto, se colocó un 30% (17 mmdp) por debajo de lo previsto en enero. Tanto en el ISSSTE como en la Secretaría de Salud el subejercicio fue mayor a 50%. Estos recortes contrastan con lo observado en el IMSS, que gastó 31% más de lo aprobado, y con las transferencias a través del FASSA a los estados, que fueron 12% mayores a las calendarizadas. De hecho, siete estados recibieron un monto 15% mayor al calendarizado.

En la inversión física también observamos recortes. El ISSSTE llegó al extremo de no gastar recursos en este rubro, a pesar de tenerlos aprobados. El IMSS gastó 38% menos de lo aprobado, y la Secretaría de Salud 39% menos.


¿Cómo avanza el gasto funcional en salud en el primer mes del año?

El gasto funcional[1] aprobado para 2021 es de 670.3 mil millones de pesos (mmdp). Al primer mes del año ya se ejercieron 38.1 mmdp, el equivalente a 6% del gasto aprobado.

Esos 38.1 mmdp pagados en enero de este año están 26% (7.9 mmdp) por arriba de los gastados en enero de 2020. Desde enero de 2018 el monto gastado a principios de año no alcanzaba los 38 mmdp, que es el promedio del gasto funcional en salud entre 2007 y 2020.



¿Cómo gastaron las principales instituciones del sector salud en el primer mes de 2021?

A falta de información oportuna por institución del gasto funcional en salud[2], en esta sección le damos seguimiento al gasto realizado por las principales instituciones de salud, sin incluir el pago de pensiones y jubilaciones en el caso IMSS y el ISSSTE[3].

En conjunto, el presupuesto de la Secretaría de Salud, el FASSA, el IMSS y el ISSSTE —estos dos últimos sin incluir el pago de jubilaciones y pensiones— suma 703.7 mmdp. En enero se ejercieron 39.3 mmdp, que equivalen a un avance de 6% en el presupuesto total. Los 39.3 mmdp erogados están 30.3% (17.1 mmdp) por debajo del monto que se tenía planeado gastar el primer mes (56.4 mmdp), pero 26% por arriba de lo ejercido el año pasado.

A pesar de que el monto total de estas instituciones refleja un subejercicio, no todas las instituciones de salud gastaron menos de lo previsto, ya que tanto el gasto del IMSS como el monto de las transferencias realizadas a los estados a través del FASSA se encontraron por encima de su meta mensual. El primero reportó un gasto de 23.6 mmdp, el cual está 31% (5.6 mmdp) por arriba del presupuesto aprobado en enero; en el caso del segundo, los recursos sumaron 10.7 mmdp, y se colocaron 12% (1.2 mmdp) por encima del monto calendarizado.

En contraparte, la Secretaría Salud erogó sólo 2.7 mmdp, monto 86% (-16.4 mmdp) menor a lo previsto en el mes (19.1 mmdp). El ISSSTE también tuvo un recorte importante, al ejercer sólo 2.3 mmdp de los 9.7 mmdp aprobados; inició el año gastando 76% (2.3 mmdp) menos de lo planeado.

Durante enero, son las transferencias del FASSA las que tienen un mayor avance con relación al presupuesto anual: 10%. Le sigue el IMSS, al ejercer 7% del presupuesto anual, y en último lugar están la Secretaría de Salud y el ISSSTE, con un avance de 2% para cada institución.



El FASSA a detalle

En el año se planea que las transferencias a los servicios de salud de los estados, a través del FASSA, asciendan a 109.5 mmdp. En enero ya se transfirieron 10.7 mmdp, el equivalente a 10% del presupuesto aprobado. Los recursos transferidos fueron 12% (1.2 mmdp) mayores a lo previsto en el calendario; no obstante, se quedaron 5.7% (0.7 mmdp) por debajo del monto transferido en 2020. Cabe mencionar que el monto transferido este mes es muy similar al de los últimos cinco años.

En enero todas las entidades federativas recibieron mayores recursos a los previstos en el calendario, pero en casi todos los estados el monto transferido fue menor al que recibieron en 2020. En este sentido, destacan Michoacán y el Estado de México, que recibieron aproximadamente 15% menos recursos. Hidalgo y Sonora son la excepción: recibieron 6% y 4% más recursos que en 2020, respectivamente.

Fueron siete estados los que recibieron 15% más recursos que los calendarizados: Puebla (23%), Veracruz (20%), Oaxaca (19%), Zacatecas (19%), Chiapas (17%), Guanajuato (17%) y Tlaxcala (16%).



¿Cuánto gastaron las instituciones de salud en inversión física en enero?

La inversión física en salud aprobada en el año es de 16 mmdp para el IMSS, el ISSSTE y la Secretaría de Salud (en ella se incluye la inversión directa, subsidios, transferencias y aportaciones). En enero estas instituciones gastaron 0.09 mmdp; es decir, hubo un avance del gasto en inversión física de 0.6%, con respecto a la meta anual.

Si bien en el primer mes se tenía planeado gastar el equivalente a 0.9% de la meta anual, el gasto observado de 0.6% no está tan alejado del plan original. Sin embargo, preocupa que en el primer mes de 2021 la inversión física ya tenga un subejercicio de 35%, y que sea 20% menor a la que se realizó en 2020.

Y preocupa aún más que todas las instituciones de salud subejercieron o no ejercieron recursos en este rubro. En enero, la inversión física se realizó de la siguiente manera:

  • El ISSSTE tenía planeado ejercer 9.2 millones de pesos (mdp), pero no ejerció recursos.
  • El IMSS gastó sólo 10.1 mdp de los 16.2 mdp aprobados; esto implica que la institución inició el año con un recorte de 38% (6 mdp) en el gasto de este rubro.
  • La Secretaría de Salud fue la institución que más recursos ejerció en este rubro: 82.6 mdp, pero incluso así se quedó corta con respecto a la meta mensual, de 116.8 mdp. El subejercicio en este mes fue de 29% (34.2 mdp).

Con relación al año previo, sólo el IMSS gastó 141% más recursos en inversión física. Entretanto, el gasto de la Secretaría de Salud fue 24% menor.


[1] El gasto funcional en salud incluye el presupuesto de las Aportaciones a Seguridad Social, del FASSA, el IMSS, el ISSSTE, la Secretaría de Salud, la Secretaría de Marina y Defensa Nacional que tiene como objetivo la prestación de servicios de salud, productos, útiles y equipo médico, productos farmacéuticos, aparatos y equipos terapéuticos.

[2] En los reportes mensuales de la SHCP el gasto funcional en salud no se puede desagregar por ejecutor. Por lo tanto, a partir de esta sección y en adelante se realiza el seguimiento del gasto neto total de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE sin incluir el gasto en pensiones y jubilaciones como un aproximado del gasto funcional en salud. Dentro del gasto analizado en esta sección y en las siguientes, se incluye parte del presupuesto de estas secretarías destinado a funciones de salud, ciencia, tecnología e innovación, coordinación de la política de gobierno y protección social.

[3] Pero en este gasto si se incluye la clasificación funcional en salud y otras clasificaciones.

Números de Erario: gasto en salud de enero a noviembre de 2020

A un mes de tener la fotografía completa del comportamiento de finanzas públicas durante 2020, algo nos queda claro en lo concerniente al gasto en salud: el Gobierno cree que todavía es septiembre. O eso parece, pues el avance en la meta de gasto anual es apenas de 76%.

Fuera de bromas, el dato es dramático, sobre todo si tomamos en cuenta que estamos a mitad de la ‘segunda ola’ de contagios por covid-19, y los servicios de salud se encuentran al límite. Por lo demás, en el reporte de noviembre confirmamos otro dato preocupante: en el acumulado, la inversión física en salud va 29% por debajo del gasto aprobado.

Por último, este mes pusimos especial atención al Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA), con el fin de descubrir cuántos recursos se han transferido a las entidades para hacer frente a sus particulares crisis sanitarias.  


  

¿Cómo avanzó el gasto funcional[1] en salud de enero a noviembre?

En el periodo los recursos ejercidos a través de la función salud abarcaron el 76% del presupuesto aprobado en el año. Los recursos erogados sumaron 516.3 mil millones de pesos (mmdp). Comparado con los recursos gastados en el mismo periodo del año anterior, el gasto en salud se incrementó 2.0% (10.4 mmdp).

Tan sólo en noviembre se gastaron 52.5 mmdp, 13% (6 mmdp) más que el gasto realizado en 2019. En el mes se vuelve incrementar el gasto funcional en salud mensual, en comparación con el año previo; esto es, después de ejercer un mayor gasto en julio y agosto con relación a 2019, en septiembre y octubre el gasto mensual fue menor al ejercido un año atrás.


¿Cómo gastaron las principales instituciones del sector salud[3] de enero a noviembre?

Como una forma de subsanar la falta de información oportuna y detallada por institución del gasto funcional en salud, en esta sección le damos seguimiento al gasto realizado por las principales instituciones, sin incluir el pago de pensiones y jubilaciones en el caso IMSS y el ISSSTE[4].

El gasto del IMSS, el ISSSTE, la Secretaría de Salud y el FASSA acumula hasta noviembre 551.6 mmdp, lo que representa el 77% del presupuesto aprobado anualmente. No obstante, esos recursos son 5.7% menores a lo que se tenía previsto gastar en el periodo; es decir, 33 mmdp no se ejercieron a través de las distintas instituciones de salud.

Hasta noviembre, es el ISSSTE la institución que más ha gastado en relación con su meta anual: 80%. Le sigue el IMSS, con 79%. En contraste, la Secretaría de Salud ejerció hasta noviembre sólo el 64% de los recursos aprobados: es la institución con menor avance en las metas anuales. Por otra parte, a través del FASSA se ha transferido a los estados el 91% del presupuesto anual.

Las principales instituciones de salud gastaron, hasta noviembre, de la siguiente manera:

  • A pesar de ser la institución con el mayor ejercicio de sus recursos, los 83 mmdp gastados por el ISSSTE estuvieron 13.5% (-13 mmdp) por debajo de la meta establecida en el periodo.
  • El IMSS ejerció en el periodo 266 mmdp; en relación con lo que tenía planeado gastar en el periodo se reportó un subejercicio de 3.5% (-9.6 mmdp).
  • El gasto de la Secretaría de Salud también fue menor a lo planeado: ejerció 109 mmdp de los 121 mmdp aprobados. Esto implica que 10% (-12 mmdp) de los recursos de esta institución no se ejercieron.
  • En contraste, las entidades federativas recibieron a través del FASSA 94 mmdp; este monto es 1% (1.2 mmdp) mayor que lo establecido en el calendario.


El FASSA a detalle

Los recursos transferidos a los estados para atender servicios de salud a través del FASSA (Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud) suman 94 mmdp en noviembre. Todas las entidades federativas recibieron más recursos en comparación con lo calendarizado a principios de año; en promedio, 1.5% más. Veracruz es el estado que más recursos adicionales recibió: 2.4% (147 mdp), mientras que la CDMX recibió únicamente 0.4% (15.9 mdp) más de lo planeado.

En comparación con 2019, se transfirieron 2.0% más recursos en el mismo periodo. De los 32 estados, 30 recibieron en promedio 2.2% más recursos, excepto Colima (disminución de 0.1% o -1.7 mdp) y Tamaulipas (de 0.4% o -12.3 mdp).


¿Cómo avanzó el gasto del sector salud específicamente en noviembre?

En noviembre se acumularon cuatro meses de recortes mensuales consecutivos en el gasto ejercido por las instituciones de salud y el FASSA. En julio de 2020 el gasto ejercido fue 2.6% mayor que el aprobado y, desde entonces, mes con mes las instituciones de salud en conjunto reportaron un menor gasto de lo previsto. Tan sólo en noviembre el subejercicio fue de 11.1% o -6.6 mmdp.

En conjunto, las principales instituciones de salud y el FASSA ejercieron en noviembre 53 mmdp; para el mes se tenía previsto que gastaran 60 mmdp. Así, el subejercicio reportado es de 11%, lo cual implica no ejercer 6.6 mmdp del presupuesto asignado en salud. Con relación a noviembre de 2019, el gasto fue 7% mayor (3.7 mmdp).

El recorte en el mes no se observó parejo en todas las instituciones. De hecho, el IMSS y el ISSSTE gastaron más de lo aprobado, y las transferencias del FASSA se encuentran en línea con el calendario. En noviembre, las instituciones de salud ejercieron el gasto de la siguiente manera:

  • El IMSS gastó 29.6 mmdp. Se tenía previsto que ejerciera 27.7 mmdp, por lo que el sobrejercicio fue de sólo 6.7% (1.9 mmdp). Desde julio la institución presentaba recortes en su gasto.
  • Este mes, la Secretaría de Salud tuvo el mayor subejercicio en lo que va del año. De los 13.9 mmdp aprobados, ejerció sólo 5.4 mmdp. El gasto no ejercido se traduce en un recorte de 61.2% del presupuesto aprobado, el equivalente a 8.5 mmdp.
  • El ISSSTE reportó un ligero sobrejercicio. De los 7.0 mmdp aprobados, gastó 0.1 mmdp más, es decir, los recursos erogados ascendieron a 7.1 mmdp.
  • Las entidades federativas recibieron a través del FASSA casi la totalidad del gasto calendarizado.


¿Cuánto gastaron las instituciones de salud en inversión física de enero a noviembre?

La inversión física en salud (que incluye inversión directa, subsidios, transferencias y aportaciones) aprobada en el año es de 20.2 mmdp. Hasta noviembre se han gastado 13.4 mmdp. Así, hay un avance de apenas 67.5% con respecto a la meta aprobada, y el subejercicio acumulado en el periodo asciende a 29% (-4.3 mmdp) con relación a lo que se planeaba ejercer.

Por institución, el gasto en inversión física en salud se realizó de la siguiente manera:

  • El ISSSTE acumula un sobrejercicio de 58.4%, superando por mucho el presupuesto anual aprobado. Hasta noviembre acumula un gasto de 2.6 mmdp, 0.8 mmdp más de lo aprobado en el año (1.8 mmdp).
  • El gasto en inversión física de la Secretaría de Salud acumulado fue de 4.9 mmdp. Reportó un avance de 93.6% con respecto al presupuesto anual. Acumula un subejercicio de 3.3% (-0.2 mmdp).
  • El IMSS es la institución que acumula el mayor subejercicio en este rubro. El gasto en inversión física pagado a noviembre fue de 5.8 mmdp, y reportó un avance de sólo 45.5% con respecto a la meta anual. El subejercicio acumulado equivale a no ejercer 52% del presupuesto aprobado en el periodo, es decir, a no gastar 6.3 mmdp.


¿Cuál fue el gasto en inversión física en noviembre?

Entre mayo y septiembre, el gasto en inversión física mensual se realizó por debajo de lo previsto para cada mes. En octubre vimos que esta tendencia se revertía. Sin embargo, en noviembre se vuelve a reportar un subejercicio en el IMSS, el ISSSTE y la Secretaría de Salud.

En noviembre, las instituciones de salud en su conjunto gastaron 0.5 mmdp de los 1.6 mmdp aprobados en inversión física. El gasto observado en el mes está en línea con el ejercido en años previos; no obstante, con anterioridad a la pandemia se aprobó un presupuesto aproximadamente cuatro veces mayor al ejercido en 2019; este incremento se aprobó para la Secretaría de Salud.

Por lo anterior llama tanto la atención que este mes la Secretaría de Salud reportara el mayor recorte en su gasto: 87% (-0.7 mmdp). Le siguió el IMSS, al subejercer 52% (-0.2 mmdp) del presupuesto aprobado. Por su parte, el ISSSTE gastó 42% (-0.08 mmdp) menos de lo calendarizado en el mes.


¿Qué observamos en el presupuesto de servicios personales?

En el reporte mensual, la SHCP indica que el gasto en servicios personales asciende a 230.6 mdp, con un aumento de 5.7% con respecto a 2019, debido a la contratación de recursos humanos para hacer frente a la pandemia. Analizamos a detalle el gasto en este rubro y, en efecto, este incremento se sostiene: incluso con relación al presupuesto aprobado el gasto en este rubro es 2.9% mayor.

Sin embargo, cuando analizamos el gasto en servicios personales por institución con relación al presupuesto aprobado, encontramos que el IMSS es la única institución que acumula un mayor gasto al esperado: 4.1% (7.3 mdp). En cambio, el ISSSTE y la Secretaría de Salud acumulan recortes en el rubro; es ésta última la que acumula el mayor recorte: 7.5% (-0.6 mdp).


[1] El gasto funcional en salud incluye el presupuesto de las Aportaciones a Seguridad Social, del FASSA, el IMSS, el ISSSTE, la Secretaría de Salud, la Secretaría de Marina y Defensa Nacional que tiene como objetivo la prestación de servicios de salud, productos, útiles y equipo médico, productos farmacéuticos, aparatos y equipos terapéuticos.

[2] El presupuesto aprobado del gasto funcional en salud, incluyendo el retiro extraordinario del Fideicomiso en Salud, fue de 680,109 millones de pesos.

[3] En los reportes mensuales de la SHCP el gasto funcional en salud no se puede desagregar por ejecutor. Por lo tanto, a partir de esta sección y en adelante se realiza el seguimiento del gasto neto total de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE sin incluir el gasto en pensiones y jubilaciones como un aproximado del gasto funcional en salud. Dentro del gasto analizado en esta sección y en las siguientes, se incluye parte del presupuesto de estas secretarías destinado a funciones de salud, ciencia, tecnología e innovación, coordinación de la política de gobierno y protección social.

[4] Pero en este gasto sí se incluye la clasificación funcional en salud y otras clasificaciones.

Números de Erario: gasto en salud de enero a agosto de 2020

Tras ocho meses de 2020, el cambio de tendencia se ha ‘asentado’, aunque moderadamente. Es decir, si en el primer semestre del año el gasto funcional[1] en salud fue 1.7% menor al mismo periodo del año anterior; y de enero a julio fue 3.4% mayor bajo la misma comparación, ahora observamos que de enero a agosto este gasto acumulado es 3.6% mayor al realizado en 2019. Pero pongamos las cosas en perspectiva: a pesar de la presión excepcional sobre los servicios de salud causada por la pandemia por covid-19, el gasto erogado en este periodo ha sido muy similar e incluso menor al observado entre 2012 y 2019.

De hecho, dos de las principales instituciones de salud, el IMSS y el ISSSTE, han gastado menos de lo calendarizado hasta agosto. Sólo la Secretaría de Salud reportó un gasto 2.4% mayor al aprobado.

A pesar de los recortes en el gasto total, tanto el ISSSTE como la Secretaría de Salud han priorizado el gasto en inversión física —el rubro donde se registra el gasto en infraestructura y equipo médico—. Hasta agosto, este gasto para el ISSSTE fue 160% mayor a lo aprobado, y 6% en el mismo sentido en Salud. Por otro lado, a pesar de que el gasto en inversión física realizado por el IMSS en marzo y abril superó con creces lo aprobado, en el periodo acumula un subejercicio de 82%.

En un mes se publicará el informe trimestral; en él sabremos con certeza qué rubros del gasto para estas instituciones han tenido recortes, al tiempo que el gasto en inversión física se ha impulsado. Además, analizaremos a detalle en qué se ha invertido.

¿Cómo avanza el gasto funcional en salud de enero a agosto?

Hasta agosto de 2020 se han ejercido 363.9 mmdp a través del gasto funcional en salud. Hay un avance de 53.5% con respecto al presupuesto anual[2].

En los primeros ocho meses del año se gastó 3.6% (12.7 mmdp) más que en el mismo periodo del año anterior; aun con la pandemia el gasto observado en este periodo no es mayor al realizado en años anteriores. De hecho, se encuentra por debajo de lo ejercido en 2017 y 2018.

¿Cómo gastaron las principales instituciones del sector salud[3] de enero a agosto?

Mes con mes damos seguimiento a los recursos desembolsados por los ejecutores de gasto en salud, ya que no es posible dar seguimiento directo al gasto funcional por ejecutor. Así, en este apartado analizamos el gasto de cada ejecutor sin incluir el pago de pensiones y jubilaciones en el IMSS y el ISSSTE[4].

Los ejecutores de salud han ejercido 392.5 mmdp hasta agosto. Hay un subejercicio de 4% (-16.4 mmdp) con respecto al presupuesto aprobado, a pesar de que el gasto es 3.2% (12.1 mmdp) mayor al del año anterior. 

A pesar de que faltan cuatro meses para cerrar el año, la Secretaría de Salud sólo ha ejercido 49% del presupuesto anual. En contraste, el IMSS, el ISSSTE y el FASSA[5] han ejercido más del 50% de su presupuesto anual.

Durante estos ocho meses, el gasto en salud se distribuyó de la siguiente manera:

  • Este mes, el IMSS presentó el mayor subejercicio. Gastó sólo 181.9 mmdp de los 192.3 mmdp aprobados para el periodo. Es decir, reportó un subejercicio de 10.3 mmdp; el equivalente a 5% del presupuesto.
  • Otra de las instituciones con un gasto menor al calendarizado fue el ISSSTE: ejerció sólo 62.8 mmdp. Eso es 9.1 mmdp por debajo de la meta establecida; el subejercicio acumulado es de 12.8%.
  • La Secretaría de Salud gastó por arriba de la meta establecida en el periodo. Los 82.4 mmdp erogados fueron 2.4% (1.9 mmdp) mayores que el gasto aprobado.
  • Entretanto, las entidades federativas recibieron en el periodo recursos por arriba de lo aprobado. Las transferencias a través del FASSA acumularon un gasto de 65.4 mmdp, o 1.8% (1.1 mmdp) más recursos de lo previsto.

¿Cómo avanzó el gasto del sector salud específicamente en agosto?

Para este mes se calendarizó un gasto de 57.4 mmdp en las instituciones de salud. No obstante, los recursos erogados fueron 9.4% menores a la meta (-5.4 mmdp). Se ejercieron sólo 52.1 mmdp, aunque con respecto al mismo mes del año pasado se observa un incremento de 5% (2.5 mmdp).

Por ejecutor, el gasto de agosto se desagrega de la siguiente manera:

  • La Secretaría de Salud no gastó el 32.7% (-5.4 mmdp) de los 12.8 mmdp aprobados. Desde abril esta secretaría presenta recortes en el gasto; con la excepción de julio, mes en que ejerció 0.1% por arriba de lo aprobado.
  • El IMSS no ejerció 7.1% (-2.1 mmdp) del presupuesto aprobado, que ascendió a 29.3 mmdp.
  • Las transferencias del FASSA este mes se encontraron 1.8% por debajo de lo aprobado (-0.1 mmdp).
  • El ISSSTE fue el único ejecutor con un sobrejercicio: ejerció 12.7% (1 mmdp) más que el gasto mensual aprobado.

¿Cuánto gastaron las instituciones de salud en inversión física?

Gasto acumulado a agosto

La inversión física en salud —que incluye inversión directa, subsidios, transferencias y aportaciones— se encuentra por debajo de la meta establecida. Para el periodo enero a agosto, se aprobaron 12.5 mmdp en inversión física; el subejercicio abarcó 2.4 mmdp (-19.6%) e hiló dos meses consecutivos de recortes.

El gasto planeado en inversión física excedía por mucho lo ejercido en el mismo periodo cada año a partir de 2013 —es importante notar que esta ‘alta meta’ de gasto se fijó incluso sin tener en mente la pandemia—. Y, de hecho, el gasto ejercido este año ha sido también mayor al observado desde 2013. Pero, de nuevo, ampliemos el contexto: en los últimos siete años este gasto se ha quedado muy por debajo de lo ejercido en 2011 y 2012.

Con respecto a la meta anual, el gasto total de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE tuvo un avance de 50.8%. Faltan por ejercer 9.7 mmdp. En relación con la meta anual de inversión física, el IMSS presenta el mayor rezago: ha ejercido sólo 32% en los primeros ocho meses del año. En el extremo se encuentra el ISSSTE, institución que excede el presupuesto anual en 33.6%. La Secretaría de Salud reporta un avance anual de 67%.

El gasto acumulado en inversión física de enero a agosto se realizó de la siguiente manera:

  • El ISSSTE acumuló un gasto de 2.4 mmdp, el cual es 34% (0.6 mmdp) mayor al aprobado en el año.
  • En el periodo de análisis, la Secretaría de Salud ejerció 3.5 mmdp. Este gasto es 14% (0.44 mmdp) mayor a lo calendarizado hasta agosto.
  • Destaca el hecho de que el gasto acumulado del IMSS se encuentre 51% (-4.2 mmdp) por debajo de lo planeado originalmente en el periodo. De los 8.3 mmdp aprobados, este instituto sólo ejerció 4.1 mmdp.

Gasto en agosto

En agosto se aprobó un gasto de 4.4 mmdp en inversión física, pero se ejercieron sólo 2.0 mmdp, es decir, un gasto 55% menor (-2.45 mmdp). No obstante, y de forma similar a lo que describimos para el acumulado, el gasto ejercido es mayor a lo erogado en los últimos siete años.

En este mes, el ISSSTE y la Secretaría de Salud gastaron en inversión física por encima de lo aprobado: 160% y 6%, respectivamente.

El IMSS no ejerció 82% del presupuesto aprobado; esta institución hiló tres meses consecutivos con recortes, lo cual contrasta con los sobrejercicios de marzo y abril.


[1] El gasto funcional en salud incluye el presupuesto de las Aportaciones a Seguridad Social, del FASSA, el IMSS, el ISSSTE, la Secretaría de Salud, la Secretaría de Marina y Defensa Nacional. Tiene como objetivo la prestación de servicios de salud, productos, útiles y equipo médico, productos farmacéuticos, aparatos y equipos terapéuticos.

[2] El presupuesto aprobado del gasto funcional en salud, incluyendo el retiro extraordinario del Fideicomiso en Salud, fue de 680,109 millones de pesos.

[3] En los reportes mensuales de la SHCP el gasto funcional en salud no se puede desagregar por ejecutor. Por lo tanto, a partir de esta sección y en adelante se realiza el seguimiento del gasto neto total de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE sin incluir el gasto en pensiones y jubilaciones como un aproximado del gasto funcional en salud. Dentro del gasto analizado en esta sección y en las siguientes, se incluye parte del presupuesto de estas secretarías destinado a funciones de salud, ciencia, tecnología e innovación, coordinación de la política de gobierno y protección social.

[4] Pero en este gasto sí se incluye la clasificación funcional en salud y otras clasificaciones.

[5] Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud. Son recursos aportados a las entidades federativas.

Números de Erario: gasto en salud de enero a julio de 2020

Después de cinco meses en los que la covid-19 ha puesto en jaque al sistema de salud, por fin se detectó un crecimiento en el gasto funcional en este sector: fue 3.4% mayor al observado el año pasado. Además, con respecto a la meta anual hubo un avance de 46.5% en el gasto acumulado. Resulta elocuente que tan sólo en julio se ejercieran 67.1 mmdp de gasto funcional, el mayor observado en lo que va del año.

Por ejecutor, observamos que el gasto acumulado a julio del ISSSTE y el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA) superó el 50% con respecto a la meta anual. Por su parte, el IMSS y la Secretaría de Salud tuvieron un avance de 46% y 44%, respectivamente.

El gasto en inversión física de los ejecutores de salud exhibió un subejercicio de 0.1% (0.01 mmdp). Esto sugiere que el gasto en este rubro se comienzó a desacelerar. Si se analiza sólo el gasto ejercido en julio, hubo un subejercicio de 44% (-1.63 mmdp).

¿Cómo avanzó el gasto funcional[1] en salud de enero a julio?

En los primeros siete meses de 2020 se han ejercido 316.2 mmdp a través del gasto funcional en salud. Esto representa un avance de 46.5% con respecto al presupuesto anual[2]. Hasta julio se gastó 3.4% (10.5 mmdp) más que en el mismo periodo del año anterior.

¿Cómo gastaron los ejecutores del sector salud[3] de enero a julio?

Mes con mes damos seguimiento al gasto total neto de los ejecutores de gasto en salud, como una forma de aproximarnos a la observación de su gasto funcional, el cual no se puede desagregar por ejecutor. Así, en este apartado analizamos el gasto por ejecutor en salud sin incluir el pago de pensiones y jubilaciones en las instituciones que lo realizan.

Hasta julio se gastaron 339.7 mmdp por los ejecutores de salud;este gasto exhibe un subejercicio de 3% (-11.7 mmdp) con respecto al presupuesto aprobado, a pesar de que el gasto fue 2.8% (9.2 mmdp) mayor que el del año anterior. 

De los cuatro ejecutores de gasto, sólo dos han ejercido más del 50% del presupuesto aprobado en el año: el ISSSTE (51%) y el FASSSA (56%).

Durante los primeros siete meses, el gasto en salud se distribuyó de la siguiente manera:

  • El ISSSTE presentó el mayor subejercicio: de los 64 mmdp aprobados en el periodo, se ejercieron sólo 53.1 mmdp. Esto representa un subejercicio de 17% (-10.85 mmdp). No obstante, es la institución que lleva mayor avance en relación con su meta anual de gasto.
  • De igual manera, el IMSS (sin considerar el gasto en pensiones) se colocó por debajo de la meta establecida. Acumuló un subejercicio de 5.1% (-8.2 mmdp). 
  • La Secretaría de Salud gastó por arriba de la meta establecida. El gasto fue 9% (6.1 mmdp) mayor al aprobado, y con respecto al año anterior el gasto fue 0.2% (0.1 mmdp) mayor.
  • Las entidades federativas recibieron recursos por arriba de lo aprobado. El FASSA transfirió un 2% (1.2 mmdp) adicional de recursos.

¿Cómo avanzó el gasto del sector salud en julio?

En julio se esperaba un gasto en salud de 69.5 mmdp, y los recursos erogados superaron esta meta en 1.5% (1.1 mmdp). Se ejercieron 70.6 mmdp, lo que representa un incremento de 27% (15.1 mmdp) con respecto al mismo mes del año pasado.

El gasto en el mes de julio por ejecutor se desagrega de la siguiente manera:

  • El ISSSTE fue el único ejecutor con un subejercicio: no ejerció 12.7% (-1.1 mmdp) con respecto al gasto mensual aprobado.
  • El IMSS es el ejecutor que más gastó por encima de su meta mensual: 6.1% (2.2  mmdp) más de lo aprobado. 
  • La Secretaría de Salud y las transferencias del FASSA estuvieron en línea con lo aprobado en el mes.

¿Cuánto gastaron en inversión física los diferentes ejecutores del sector salud?

Gasto acumulado a julio

La inversión física en salud —que incluye inversión directa, subsidios, transferencias y aportaciones— se colocó por debajo de la meta establecida. En los primeros siete meses acumuló un gasto de 8.05 mmd, el cual es 0.1% (-0.01 mmdp) menor al gasto aprobado.

El gasto total de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE presentó un avance de 40.7% con respecto a la meta anual; aún faltan por ejercer 11.7 mmdp. De estos ejecutores, sólo el ISSSTE ha ejercido más del 50% del gasto anual; incluso excedió el presupuesto anual en 8.75%.

El gasto acumulado en inversión física a julio se realizó de la siguiente manera:

  • El ISSSTE ejerció más que el presupuesto aprobado durante todo el año: gastó 1.1 mmdp de los 0.9 mmdp aprobados en 2020. Sin embargo, no logró compensar el subejercicio exhibido por el IMSS.
  • El IMSS es el único ejecutor que presentó un gasto menor al aprobado: 29% (1.4 mmdp) por abajo.
  • Por otro lado, la Secretaría de Salud reporta un gasto 18% (0.3 mmdp) por encima de lo aprobado a julio.

Gasto en julio

En julio se aprobaron 3.6 mmdp en inversión física, pero se ejercieron 2.6 mmdp. Esto representa un subejercicio de 44% (1.6 mmdp). Es el mayor subejercicio en lo que va del año (ver gráfica 9).

En julio, el ISSSTE y la Secretaría de Salud gastaron por encima de lo aprobado: 192% y 151%, respectivamente. El IMSS no ejerció 80% del presupuesto aprobado. Esto representa el mayor subejercicio de 2020.


[1] El gasto funcional en salud incluye el presupuesto de las Aportaciones a Seguridad Social, del FASSA, el IMSS, el ISSSTE, la Secretaría de Salud, la Secretaría de Marina y Defensa Nacional. Tiene como objetivo la prestación de servicios de salud, productos, útiles y equipo médico, productos farmacéuticos, aparatos y equipos terapéuticos.

[2] El presupuesto aprobado del gasto funcional en salud, incluyendo el retiro extraordinario del Fideicomiso en Salud, fue de 680,109 millones de pesos.

[3] En los reportes mensuales de la SHCP el gasto funcional en salud no se puede desagregar por ejecutor. Por lo tanto, a partir de esta sección y en adelante se realiza el seguimiento del gasto neto total de la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE sin incluir el gasto en pensiones y jubilaciones como un aproximado del gasto funcional en salud. Dentro del gasto analizado en esta sección y en las siguientes, se incluye parte del presupuesto de estas secretarías destinado a funciones de salud, ciencia, tecnología e innovación, coordinación de la política de gobierno y protección social.

  • 1
  • 2