El curioso caso de los apoyos financieros registrados como inversión física
Los ingresos
totales del sector público van 6.1% por debajo—o cortos en 169 mmdp— en relación con los previstos en la Ley de Ingresos (LIF) a junio de este año.
La pérdida no ha dejado de
aumentar conforme avanza el año: la SHCP reportó que se
obtuvieron 406 mmdp de ingresos totales
durante junio de 2020; al cierre de marzo éstos ascendieron
a 527 mmdp. Esto significa que los
ingresos cayeron 23% en tres meses. Sin embargo, con relación a mayo se observó
una mejora. Aunque sigue aumentando el rezago de los ingresos aprobados, la
pérdida marginal observada en junio fue menor —un 11% de rezago versus 24%, en mayo—
En
el renglón del gasto, en los primeros seis meses del
año hubo un subejercicio acumulado, y éste se pronunció en el mes de junio. El gasto neto
del Sector Público mantuvo un subejercicio de enero a junio de 5.3% (-163.6
mmdp), pero sólo en junio el subejercicio sumó 12% de su meta para el mes o -75
mmdp. Pemex sigue siendo el ente público con mayor subejercicio, aunqueel más preocupante, dada
la pandemia por covid-19, se encontró en el gasto en salud.
El gasto acumulado a junio de los principales ejecutores del
gasto en salud presentó un subejercicio de 4% (-11.45 mmdp) —pueden ver el análisis completo y detallado del gasto en
salud, aquí—. A
pesar del subejercicio, observamos que la inversión física es prioritaria en
los planes de gasto en salud de los últimos meses; reporta un avance de 35.2
mayor (1.63 mmdp) a lo que se tenía planeado ejercer (4.64 mmdp). Es en este
rubro donde se encuentra el presupuesto para la compra de insumos médicos y de
laboratorio.
En general, llama
fuertemente la atención que el gasto total de inversión física se fortaleció.
Tuvo un incremento de 17% (48.9 mmdp) en relación con el mismo periodo del año
anterior. Sin embargo, este incremento se debe —y como ya tuvimos indicios en
los Números de Erario con corte a mayo— a que la Secretaría de Economía registra como inversión física el gasto de 27
mmdp del Programa de Apoyo Financiero a Microempresas Familiares, el cual
no debería entrar en esta clasificación, pues su fin es financiar el gasto
corriente —principalmente pago de nómina y servicios— y no de capital de las
empresas con el fin de disminuir el impacto de las afectaciones económicas
derivadas por la covid-19. Si no se considera este programa dentro de la
inversión física, el aumento con respecto al mismo periodo del año anterior
sería sólo de 7% (20.3 mmdp).
Durante junio, el gasto en
inversión física del Sector Público fue de 54.2 mmdp, y representó el 10% del
gasto total para ese mes. Se incrementó en dos puntos su participación en el
gasto total respecto al mismo mes de 2019. Con respecto al monto aprobado, la
inversión física tuvo un subejercicio de 11% (-6.9 mmdp)
El Balance Primario y el Balance Público
mostraron un leve deterioro con respecto al mismo periodo del año anterior. El Balance Primario
sumó 0.3% del PIB, y el Público tuvo un déficit de 293 mmdp.
Con respecto a
los recursos provenientes de fideicomisos, a junio se reportaron
disponibilidades por 728.4 mmdp y egresos por 275 mmdp. Hasta el primer
semestre se han extinguido ocho fideicomisos y 32 se encuentran en proceso
de extinción.
Análisis del ingreso
Ingresos observados versus metas de ingresos 2020
junio 2020 y enero – junio 2020
¿Cuántos ingresos obtuvo el Sector
Público?
La
SHCP reportó que el Sector Público ingresó 2 billones 603 mmdp durante los primeros seis meses de 2020.
Además de
cuantificar los ingresos públicos totales, es importante identificar el monto
de los recurrentes. Así
se puede elaborar una mejor apreciación de la
sostenibilidad de los ingresos públicos. Sin
el monto de los ingresos extraordinarios por 106 mmdp —provenientes de
la liquidación de fideicomisos[1] por 59.9 mmdp y de las transferencias a Pemex por 46 mmdp—, los ingresos no
compensados o recurrentes sumaron 2 billones 497 mmdp.
Sólo en junio se obtuvieron 406.9
mmdp de ingresos totales.
Aumentaron en relación con mayo, cuando ascendieron a 326.8
mmdp, e igualaron el monto observado en abril. Sin embargo, es importante
desagregarlos para identificar qué impulsó la leve mejora.
Los ingresos tributarios ascendieron en
junio a 249 mmdp; en mayo sumaron 221 mmdp, pero en marzo, justo al
inicio de las medidas de contención de la pandemia, ascendieron
a 376 mmdp, por lo que en tres meses (abril-junio) cayeron 34%.
Por su parte, los ingresos petroleros aumentaron en mayor proporción, debido al incremento en el precio de la Mezcla Mexicana de Exportación (MME). En junio ingresaron 63.8 mmdp, es el mayor ingreso mensual observado en lo que va del año. La recuperación es buena, si consideramos que en mayo se obtuvo un ingreso de 28.3 mmdp. Si no consideramos las transferencias directas a Pemex, estos ingresos en realidad ascendieron a 53.4 mmdp.
¿Cuál es la contribución de los
distintos ingresos del Sector Público?
Se mantiene baja la contribución de los ingresos
petroleros a la bolsa total de los ingresos públicos. Mientras que en el
periodo enero-junio de 2018 representaron el 19%, en el mismo periodo de 2020 alcanzaron
sólo el 9.6%. Su participación se redujo prácticamente a la mitad.
La participación de los ingresos
tributarios se incrementó en el mismo periodo, pero no todo es buena
noticia. Lamentablemente la pandemia
los debilitó. Al revisar los montos identificamos que entre abril y junio han ido perdiendo parte del
terreno ganado en los primeros meses del año. Pasaron de promediar una
recaudación de 319 mmdp en los primeros cuatro meses a recaudar 291 mmdp en los
primeros seis meses del año.
¿Cómo avanzan los ingresos públicos?
Los ingresos totales del Sector Público tienen un avance de 47.1% respecto a su meta anual en la LIF. Respecto a la meta de ingreso actualizada por la SHCP en junio de este año, llevan un avance de 49.7%.
A pesar del
repunte que exhibieron en junio, los ingresos petroleros fueron los que registraron
un menor avance en sus metas anuales: 25.3%
respecto a lo aprobado en la LIF y 30.9% respecto a lo estimado por SHCP en
junio para el cierre del mismo año.
Al revisar los ingresos acumulados en los primeros seis meses del presente año en relación con su meta semestral, descubrimos que los ingresos totales del Sector Público se quedaron cortos. Observamos un rezago de 6.1% (-169 mmdp) en relación con los aprobados en la Ley de Ingresos. En mayo fue de 5.2%, es decir, el rezago sigue aumentando.
El mayor rezago lo siguen mostrando los ingresos petroleros:
reportaron un faltante de 45.5% (-208 mmdp), que en realidad es mayor si no consideramos las transferencias del Gobierno federal a Pemex, registradas como
ingresos petroleros (-254.9 mmdp o 55.6%).
De igual
forma, los ingresos tributarios se rezagaron 3.7% de su meta
estimada en el calendario (-67.4 mmdp) en el mismo periodo. Al haber pérdida,
no existieron ingresos tributarios excedentes para compensar el desplome de los
petroleros. Por eso el Poder Ejecutivo,
dada su negativa a solicitar mayor endeudamiento, ha
extinguido recursos de fideicomisos.
Al desagregar los ingresos por
tipo, hallamos esto:
- No observamos más el ingreso excedente de IVA acumulado en los primeros meses
del año, el cual se verificó hasta mayo. Las
medidas para evitar la evasión y elusión fiscal del IVA que avivaron la
recaudación al inicio del año ya fueron superadas por los efectos de la
pandemia. Ahora lo que se identifica es un
rezago de 3% (-15.1 mmdp).
- El ISR tuvo un rezago de 2.6% (-25.8 mmdp).
- A pesar de que los ingresos no petroleros y no tributarios (NTNP) también tuvieron excedentes considerables, no alcanzaron para compensar la caída de los petroleros. Los ingresos excedentes por ingresos NTNP sumaron 114 mmdp; no logran compensar la pérdida observada en los demás ingresos, que es de 283.3 mmdp.
Al analizar los ingresos a junio y su tendencia
en el año, se destaca que
los ingresos tributarios se quedaron 14% por debajo
de su meta estimada en el calendario (-41.5 mmdp), por lo que en junio no
se registraron ingresos excedentes de este tipo, sino una pérdida
considerable.
El IVA tuvo un
rezago de 28.6% (-24.2 mmdp) en relación con la
LIF. El ISR exhibió
un rezago de 2.8% (-4.2 mmdp) en el mismo ámbito.
A pesar de que
en términos absolutos los ingresos petroleros del Sector Público en junio
alcanzaron el mayor monto visto en el año, aún reportaron un rezago con
relación a lo que se esperaba para ese mes: 16% (-11.8
mmdp), con respecto a los ingresos aprobados. Los ingresos petroleros, sin
compensar, exhibieron una pérdida aún más
dramática: 29% (-22.3 mmdp) por
debajo de la meta calendarizada en junio.
En contraste, los ingresos NTNP superaron en 52% su meta del mes de junio. Sin embargo, como montos
excedentes tampoco alcanzaron para compensar la
pérdida observada en los petroleros y en la recaudación (7.3 mmdp vs. -53.3
mmdp).
Análisis del gasto
Enero – junio 2020
¿Cuánto se gastó en los primeros seis
meses del año?
El gasto neto total del Sector
Público en los primeros seis meses de 2020 fue de 2 billones 922 mmdp. Al interior, el gasto programable del SP fue de 2 billones 73 mmdp y
representó el 71% del gasto neto total; el porcentaje restante (29%) lo ocupa
el gasto no programable:848 mmdp. El gasto de
inversión, un gasto programable, fue de 326 mmdp, y representó sólo el 11% del total, lo que contrasta con el 18% del total que llegó a representar en 2014.
El costo financiero, un gasto no programable, representó
el 13% (374.7 mmdp) del total del gasto observado de enero a junio de este año. Su participación en el total se
incrementó. Si en mayo de 2012 fue de 8.3%, en los últimos ocho años aumentó
53.8% real.
Es una de las
obligaciones crecientes que han reducido el espacio fiscal en los últimos años.
La inversión física pública merece una
mirada a detalle.
Observamos que en los primeros seis meses de 2020 este tipo de gasto tuvo un
incremento de 17% (48.9 mmdp) en relación con el mismo periodo del año
anterior.
La inversión
distinta de Pemex creció 19% real (33 mmdp) respecto al mismo periodo de 2019,
y representó el 63% del gasto en inversión física del Sector Público. Por su parte,
la inversión en Pemex se incrementó 13% (14 mmdp), respecto al año previo.
La Secretaría de Economía ejerció 8.4%
(28.2 mmdp) de la inversión física, lo que representa un incremento de 2,219%
(27 mmdp) respecto al mismo periodo de 2019. Este extraordinario
incremento corresponde a los 27 mmdp del Programa de
Apoyo Financiero a Microempresas Familiares, que se reportan como inversión
física. Este programa no debería
clasificarse dentro del gasto de inversión física, pues su fin es financiar el gasto
corriente —principalmente pago de nómina y servicios— y no el de capital de las
empresas, con el fin de disminuir el impacto de las afectaciones económicas
derivadas por la covid-19. Si no se considera el
gasto de este programa, la inversión física de esta secretaría tendría una
caída de 34% (-0.4 mmdp) con respecto al mismo periodo de 2019.
Los otros
ejecutores que influyeron en el incremento de este tipo de gasto respecto al
año previo fueron: Adefas, 103% (3 mmdp); Turismo, 1,754% (3.5 mmdp); IMSS,
424% (2 mmdp), y Comunicaciones y Transportes, 1% (1.3 mmdp).
Sin tener en consideración el
ya mencionado Programa de Apoyo Financiero a Microempresas Familiares, la
inversión física pública total tendría un crecimiento de 7% (20.3 mmdp) con
respecto al mismo periodo de 2019. Y con respecto a los 327.8 mmdp aprobados
para el periodo enero-junio de este año, habría un recorte de 6% (-20.1 mmdp).
¿Cómo se distribuye el
gasto público por tipo de ejecutor?
Si hacemos un análisis por tipo de
ejecutor, observamos que a través de los Ramos Generales se gastó —y suele
gastarse— la mayor parte del presupuesto: 58% (1,680 mmdp) del gasto total. A
través de los Ramos Generales el Gobierno federal da cumplimiento a sus
obligaciones financieras o mandatos legales. Por ello, son ‘cajones’ de gasto
que ejecuta o distribuye la SHCP directamente y que no se pueden recortar
fácilmente; para hacerlo puede ser necesario hacer reformas o
refinanciamientos. Entretanto, los Ramos Administrativos o secretarías
ejercieron 21% (607 mmdp).
Los Ramos Autónomos, por su parte,
gastaron sólo 2% (55 mmdp) del presupuesto: es evidente que su participación en
el gasto es poco significativa. Por esta razón las medidas de austeridad
aplicadas a sus presupuestos no tendrán un efecto sustantivo en el tamaño o
composición del mismo, pero sí pueden afectar su operación y cumplimiento de
objetivos.
¿Cómo avanzó el gasto
del Gobierno de enero a junio de 2020?
El gasto neto total tiene un avance
de 47.8% con respecto a su meta anual aprobada y 48% con respecto a la meta
estimada por la SHCP para el cierre de año con la nueva actualización de
finanzas públicas. Si no tomamos en cuenta las transferencias a Pemex, tiene un
avance menor: de 38.7% respecto a la meta anual aprobada en el PEF.
El gasto programable del SP tiene un
avance de 47% con respecto a su meta anual de gasto aprobada y con respecto a
la meta estimada con la actualización de finanzas públicas es de 46%.
El gasto no programable del SP tiene
un mayor avance: de 50% con respecto a su meta anual de gasto aprobada y 54%
con respecto a la meta estimada .
La inversión física pública del SP
tiene un avance de su meta aprobada de 49%; mientras que el costo financiero
presenta un avance del 29% con respecto a su meta aprobada y a la actualizada este mes.
Si analizamos los tipos de ejecutores de gasto, observamos
que los Ramos Administrativos tuvieron el mayor avance con respecto a las metas
anuales de gasto aprobadas: el 52.9%. Por el contrario, los Ramos Autónomos
tuvieron el menor avance en relación con la meta anual aprobada: 39.6%.
El gasto neto del
Sector Público mantuvo un subejercicio de enero a junio de 5.3% (-163 mmdp).
En relación con su propio presupuesto aprobado al primer
semestre del año, observamos los siguientes ejercicios por tipo de ejecutor:
- EPE (Pemex y CFE):
subejercicio de 10.6% (-59.8 mmdp)
- Ramos Generales
subejercicio de 5.7% (-101.9 mmdp)
- Ramos Autónomos:
subejercicio de 24.1% (-17.4 mmdp)
- ECPD (ISSSTE e IMSS):
subejercicio de 2.3% (-12.8 mmdp)
- Ramos Administrativos:
sobrejercicio de 4.6% (26.4 mmdp)
Por otra parte, si
analizamos por separado qué ramos subejercieron y cuáles sobrejercieron,
obtenemos lo siguiente…
Así se repartió el subejercicio del gasto público observado en relación con presupuesto aprobado:
- Petróleos Mexicanos o Ramo 52: 14%
(-47.6 mmdp)
- Participaciones a Entidades
Federativas y Municipios o Ramo 28: 8% (-39.8 mmdp)
- Deuda pública o Ramo 24: 8% (-22.8
mmdp)
- Provisiones Salariales y Económicas o
Ramo 23: 20% (-16.64 mmdp)
- Instituto de Seguridad y Servicios
Sociales de los Trabajadores del Estado o Ramo 51: 5% (-12.2 mmdp)
- Comisión Federal de Electricidad o
Ramo 53: 5% (-12.18 mmdp)
- Aportaciones Federales para Entidades
Federativas y Municipios o Ramo 33: 2% (-8.8 mmdp)
- Previsiones y Aportaciones para los
Sistemas de Educación Básica, Normal, Tecnológica y de Adultos: 22% (-4.55
mmdp)
- Adeudos de Ejercicios Fiscales
Anteriores o Ramo 30: 13% (-2.8 mmdp)
- Instituto Mexicano del Seguro Social
o Ramo 50: 1% (-2.6 mmdp)
- Cultura: 18% (-1.14 mmdp)
- CNDH: 37% (-0.31 mmdp)
- Desarrollo Agrario, Territorial y
Urbano: 36% (-0.16 mmdp)
Así se repartió el sobrejercicio del gasto público en relación con el presupuesto aprobado:
- Economía o Ramo 10: 1,267% (27.5
mmdp)
- Energía o Ramo 18: 21% (8.7 mmdp)
- Salud o Ramo 12: 12% (6.1 mmdp)
- Turismo o Ramo 21: 132% (2.6 mmdp)
- Relaciones Exteriores: 17% (0.76
mmdp)
- Gobernación: 29% (0.69 mmdp)
Dentro de los Ramos Administrativos,
ocho ejecutores de gasto sobrejercieron, mientras que los demás tuvieron un
subejercicio. Como se ve, destacaron dos Ramos con un gasto mayor al 100% de su
meta aprobada en el periodo: Economía: 1,267% y
Turismo: 132% (2.6 mmdp)
Dentro de los Ramos Generales, no hubo ninguno que exhibiera un gasto mayor al
aprobado, mientras que siete de ocho ejecutores de gasto de este tipo tuvieron
subejercicio. El Ramo 25 o Previsiones y Aportaciones para los Sistemas de
Educación Básica, Normal, Tecnológica y de Adultos tuvo el mayor subejercicio
respecto a su meta a junio: 22% (-4.55 mmdp).
Pemex tuvo un subejercicio de 14% (-47.6 mmdp) respecto a su
meta al mes de junio. La CFE tuvo un subejercicio de 5% (-12.1 mmdp).
El Tribunal Federal de Justicia
Administrativa fue el Ramo que mostró el mayor subejercicio de enero a junio:
37%, seguido por la CNDH con 37%, respecto a su presupuesto aprobado.
¿Cómo avanzó el gasto
del gobierno sólo en junio 2020?
El subejercicio del gasto se profundizó en junio: aumentó su
tamaño en relación con el observado en los primeros meses del año. El gasto
total en junio fue de 549.8 mmdp, 12% por debajo de su meta para el mes (-75
mmdp).
Durante el mes de junio el subejercicio pegó tanto en el
gasto programable como en el no programable, a diferencia de mayo, se observó
que la afectación es mayor en el gasto no programable. El gasto programable del
SP en el mes de junio (334.9 mmdp) se rezagó 8.6% (31.5 mmdp). En parte por un
rezago en el gasto en inversión física, en junio se gastaron 54.2 mmdp, similar
al gasto observado en abril, de 52.1 mmdp.
Cabe señalar que el costo financiero del Sector Público en
junio de 2020 fue de 161 mmdp. Dicho costo financiero del SP tuvo un
subejercicio de 7.7% (-13.5 mmdp) respecto a su meta de junio.
¿Cómo avanzaron los programas
presupuestarios?
Se identificaron cinco programas presupuestarios que tuvieron
un gasto mayor al aprobado en más de 5 mmdp. Éstos sumaron 174.9 mmdp de gasto
adicional. Los programas pertenecen a cuatro ejecutores de gasto, y son:
- De CFE –
Comercialización de energía eléctrica y productos asociados: 339% (85.5 mmdp).
- De la Secretaría de Salud
– Atención a la Salud y Medicamentos Gratuitos para la Población sin Seguridad
Social Laboral: 1,024% (33.6 mmdp).
- De la Secretaría de
Economía – Programa de Apoyo Financiero a Microempresas Familiares,
de reciente creación, ejerció 27.5 mmdp.
- De CFE – Operaciones
Ajenas: 1,668% (17.2 mmdp).
- Del IMSS – Régimen de
Pensiones y Jubilaciones IMSS: 26% (11.1 mmdp).
En contraste, los cinco programas presupuestarios con mayor subejercicio sumaron un monto
de -192.6 mmdp:
- De Deuda Pública – Valores
Gubernamentales: 10% (-23.6 mmdp)
- De Participaciones
Federales y Estatales – Fondo General de Participaciones: 7% (-26.6 mmdp)
- De Pemex – Proyectos de
Infraestructura económica de hidrocarburos: 21% (-31 mmdp).
- De CFE: Operación y
mantenimiento de la Red Nacional de Transmisión: 616% (-31.5 mmdp); Operación
y mantenimiento de las centrales generadoras de energía eléctrica: 69% (-32.8
mmdp); Operación y mantenimiento de la
infraestructura del proceso de distribución de energía eléctrica: 306% (-47
mmdp).
Fideicomisos
De los 332 fideicomisos
a junio de 2020, 305 se encontraban en operación y 32 en proceso de extinción. De enero a junio de 2020 se dieron
de alta dos fideicomisos y ocho se extinguieron.
Las disponibilidades de los 332 fideicomisos sumaron 728.4
mmdp al 30 de junio de 2020. Esto representa una disminución de 19.3% con
respecto a las disponibilidades reportadas en el mismo periodo del año
anterior. Hasta este periodo se
registran egresos por 276 mmdp e ingresos por 241 mmdp.
El 59% de los egresos reportados corresponden a 5
fideicomisos:
- Fondo de Capital de
Trabajo del CENACE
- Fondo de la Financiera
Rural
- Fondo Laboral Pemex
- Fideicomiso para el
Desarrollo del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México
- Fideicomiso Fondo de
Salud para el Bienestar
Cuatro fideicomisos reportaron disponibilidades sustanciales,
que suman el 57% (411.9 mmdp):
- El Fideicomisos del Fondo
de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF) reportó
176.9 mmdp.
- El Fideicomiso Fondo de
Salud para el Bienestar reportó 101.1 mmdp.
- El Fideicomisos para
administrar la Contraprestación del Artículo 16 de la Ley Aduanera reportó 70.3
mmdp.
- Y el Fideicomiso del
Fondo de Reconstrucción de Entidades Federativas reportó 63.6 mmdp.
De los 32 fideicomisos que se encuentran en proceso de
extinción, ninguno presenta un avance de 100%. No obstante, la SHCP reporta que
11 de ellos tienen un avance en el proceso de extinción mayor a 80%. En lo que va del año, los fideicomisos en
proceso de extinción registran disponibilidades por 1 mmdp, egresos por 0.85
mmdp e ingresos por 0.02 mmdp. Estos fideicomisos reportaban un saldo final
del ejercicio anterior por 1.78 mmdp.
Se identifica que 14 de estos fideicomisos reportan 0.0 pesos
de disponibilidades.
Análisis del balance
del Sector Público
¿Cómo avanzó el balance público
durante los primeros cinco meses del año?
El Balance Primario se encontró por debajo de su meta
calendarizada, ya que sumó 0.3% del PIB (61.2 mmdp), pero el programado era de
0.5% del PIB (81.8 mmdp).Este leve
deterioro se debió a que el recorte del gasto fue menor a la caída de ingresos.
El Balance Público también exhibió un deterioro en su
posición en comparación con la observada en meses anteriores, pero se encontró
por arriba de lo calendarizado para junio: fue de -293 mmdp, cuando se tenía
calendarizado un déficit de -311 mmdp.
La medida más amplia
de endeudamiento público, los Requerimientos Financieros del Sector Público o
RFSP, fue de -338.7 mmdp a junio de 2020, o -1.5% del PIB. Esto indica que el Sector Público necesitó endeudarse en junio.
Para el cierre del
año, la SHCP estima que los RFSP serán de -5.4% del PIB, lo que significa que hay un espacio de 3.9 puntos del PIB para el resto
del año.
El Saldo Histórico de
Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) al mes de junio sumó 12 billones 073 mmdp de
pesos. Es decir, se incrementó en 10.9% o 1 billón 188 mmdp respecto a junio de
2019. Esto sucedió, en parte, por la depreciación en 20% del tipo de cambio al
cierre de junio 2020, cuando éste se determinó en 23.08 pesos por dólar al
cierre de mes. En junio de 2019 fue 19.20 pesos por dólar[2].
El SHRFSP representó
el 52.1% del PIB a junio de 2020, un incremento de 8.5 puntos porcentuales
respecto al mismo periodo del año previo. Esta
proporción es la más alta para un periodo similar desde el año 2000.
La SHCP espera cerrar
2020 con un SHRFSP en 52.1% del PIB (12 billones 838 mmdp). No obstante, los
analistas esperan una caída mayor del PIB, lo que podría afectar la recaudación
y elevar la necesidad de financiamiento.
Variables de contexto
Aquí
presentamos un análisis de la evolución de ciertas variables que te ayudan a
entender mejor el comportamiento del presupuesto.
Crecimiento económico
La SHCP estimó en la
actualización de finanzas públicas una caída de -7.4% del PIB para 2020. Sin
embargo, entre distintas instituciones financieras —FMI y analistas
financieros— prevén escenarios de una contracción económica de -9.7% a -10.5%
para 2020. Esta situación puede redundar en una mayor caída de ingresos a la
esperada por las autoridades.etrás de una mayor caída en la actividad económica
está una mayor pérdida de puestos de empleo y empresas sin solvencia o
quebradas, que causan un menor pago de impuestos por consumo e ingreso.
Producción de petróleo
La producción nacional
promedio de petróleo en junio disminuyó 2.9% con respecto al mismo mes del año
anterior. No obstante, la producción promedio nacional de crudo fue 5.6% menor
que la establecida en el presupuesto —alcanzó 1,712 miles de barriles diarios
(mbd), es decir, 138 mbd inferior a la meta actualizada para 2020 en los PCGPE
2021, que es de 1,850 mbd—.
Precio del petróleo
En los primeros seis
meses de 2020 el precio de la Mezcla Mexicana de Exportación fue de 31.76
dólares por barril[3]. Ésta
se ubicó, en promedio, 32% por arriba (7.76 dólares) del precio estimado en
PCGPE 2021 para 2020, que fue de 24 dólares por barril. La Secretaría de
Energía determinó que disminuirá la producción de crudo a 1,681 mbd. Este
escenario de menor producción, menor demanda y caída de precios impone
condiciones preocupantes para Pemex en un plazo inmediato.
IEPS a gasolinas y diésel
Los impuestos especiales a las
gasolinas y diésel federales se mantuvieron sin reducciones en junio, y
promediando los impuestos por litro más altos en los últimos tres años.
Valor de la inversión física pública
Observamos que en los
primeros seis meses de 2020 el gasto en inversión física pública tuvo un
incremento de 17% (48.9 mmdp) en relación con mismo periodo del año anterior.
El gasto en inversión
física pública distinta de Pemex creció 19% real (34 mmdp) respecto al mismo
periodo del año anterior; ésta representó el 64% del gasto en inversión física
del Sector Público. Por su parte, la inversión física pública en Pemex se
incrementó 13% (14 mmdp) respecto al año previo.
De igual forma, el
valor de la construcción públicacontinuó
con una trayectoria decreciente. Dicho valor (UDM[4]) al mes de
mayo 2020 fue el más bajo desde 2007, incluso menor al observado en la crisis
de 2009.
Anexo
Programas
presupuestarios
[1] Se consideraron los aprovechamientos
provenientes de recuperaciones de capital reportadas en Estadísticas Oportunas
de la SHCP.
[2] Cifras obtenidas a partir del tipo de
cambio para solventar obligaciones publicado por Banxico en: https://www.banxico.org.mx/SieInternet/consultarDirectorioInternetAction.do?sector=6&accion=consultarCuadro&idCuadro=CF102&locale=es
[3] Fuente, promedio de las cifras reportadas
en https://www.banxico.org.mx/apps/gc/precios-spot-del-petroleo-gra.html
[4] Últimos Doce Meses